jueves, 24 de octubre de 2013

Camino de SANTIAGO

Capilla Corpus Christi

Capillas
Capilla Mozárabe

La capilla del Corpus Christi, conocida por Capilla Mozárabe, fue destinada en 1504 por el cardenal Cisneros para que en ella se celebrase el culto en rito Hispano Mozárabe que con dificultades  habían conservado los mozárabes (cristianos en territorio islámico) y que desde la reconquista de la ciudad en 1085, solo se celebraba en Toledo.  Aquí se encontraba la antigua sala capitular de la que solo se conserva un cielo estrellado recientemente descubierto. Las trazas  de la capilla son del insigne arquitecto Enrique Egas y sus obras duraron desde 1502 hasta 1510, pero en 1622 al incendiarse la linterna tuvo que ser reconstruida por el hijo de El Greco Jorge Manuel, siendo finalizadas en 1631. En la puerta de entrada se encuentra una reja labrada por Juan Francés en 1524, coronada por los escudos de Cisneros y del canónigo obrero Diego López de Ayala. Detrás, un trampantojo gótico en forma de portada, pintado por Juan de Borgoña en 1514 y coronado por una Piedad atribuida a Enrique Egas. En su interior podemos contemplar las pinturas murales que conmemoran el Sitio y la Toma de Orán por el Cardenal Cisneros en 1509 y pintadas por Juan de Borgoña en 1514.  Preside el altar un retablo reformado en 1791, compuesto por tablas de santos y coronado por un crucifijo iberoamericano de 1590, más un mosaico central, elaborado en el taller Vaticano y encargado por el cardenal Lorenzana, que representa la Virgen y el Niño siguiendo un grabado de Carlo Maratta. En esta capilla se sigue celebrando diariamente el culto en rito Hispano Mozárabe.

Capilla San Ildefonso

Esta  Capilla está dedicada a San Ildefonso desde la fundación de la Catedral en 1215 por el Arzobispo Jiménez de Rada. Su espaciosa forma actual se debe a la demolición de tres pequeñas que ocupaban este recinto. Situada en la zona central del ábside, tiene forma octogonal y es de estilo gótico con bóveda de crucería con lóbulos dorados en los nervios y escudo de armas de Gil Carrillo de Albornoz, donde está enterrado este  insigne Cardenal, fallecido en Viterbo (†1364), que fue legado pontificio, ministro de Alfonso XI y fundador del Colegio Español de Bolonia. El centro de la capilla lo ocupa el sepulcro del fundador, y desde la izquierda podemos ver al Nuncio Papal Alejandro Frumento († 1580), el Arzobispo Juan Martínez de Contreras (†1434), D. Iñigo López Carrillo (†1491) y el del Cardenal Gaspar de Borja y Velasco († 1645). A la derecha del altar, la gran obra del plateresco español del escultor Vasco de la Zarza: el maravilloso sepulcro del Obispo de Avila, D. Alonso Carrillo de Albornoz realizado en 1515. Recientemente entre las rejas y el sepulcro de Albornoz ha sido sepultado el cardenal Marcelo González Martín (†2004).El retablo central del fondo fue construido en 1780 por Ventura Rodríguez con la representación de la Descensión de la Virgen para la imposición de la Casulla a San Ildefonso.  
Esta Capilla funeraria fue construida entre 1435 y 1440 por Hanequín de Bruselas y costeada por el condestable D. Álvaro de Luna, favorito de Juan II que tras caer en desgracia, fue decapitado en 1453. Ocupa tres tramos de la girola exterior y está realizada en estilo gótico toledano con bóveda de nervadura estrellada. En el centro de la capilla los sepulcros de D. Álvaro de Luna y Da. Juana Pimentel, su esposa, que gracias a ella pudo terminarse. Otros enterramientos de destacados familiares ocupan los laterales como (de izquierda a derecha) los de Juan de Cerezuela (†1442) y Pedro de Luna (†1404), Arzobispos de Toledo, y D. Juan de Luna y D. Álvaro, hijo y padre del Condestable respectivamente.
La Capilla de Reyes Nuevos, llamada así para diferenciarla de los Viejos, que se encuentran en la Capilla Mayor, fue construida entre 1531 y 1534 como capilla funeraria de la dinastía de los Trastámara, sobre lo que anteriormente fue la herrería de la Catedral. Los planos los presentó Covarrubias al emperador Carlos V, que los aprobó de inmediato.

miércoles, 23 de octubre de 2013

Historia

Más allá de su valor histórico y artístico concreto, la Iglesia Catedral tiene un valor y un significado teológico como referente para la vida pastoral de toda la diócesis, para los sacerdotes y para los fieles laicos. Además, las catedrales han sido lugar de forja de nuestra cultura occidental y europea; en ellas estuvo el embrión de las actuales universidades, anticiparon labores asistenciales y fueron talleres de arte. Hoy las catedrales son testigos de esa cultura y mensaje de transcendencia y de valores para las personas de hoy.

Capilla Santísimo,

La Capilla del Santísimo cobija la imagen de Nuestra Señora, la Virgen del Sagrario, patrona de Toledo; así llamada por estar situada guardando el Sacrarium, lo sagrado, lugar de las reliquias de los santos que se veneran en la Catedral.

capilla mayor

a actual planta se debe al Cardenal Cisneros que ordenó su reforma, dejando varios de los elementos precedentes. Con el traslado de los Reyes Viejos a un lateral, logró su ampliación, permaneciendo enterrados en sus sepulcros originales, el Rey Alfonso VII a la izquierda, su hijo Sancho el Deseado y Sancho el Bravo en la derecha.

Catedral Primada de Toledo

Capilla de la Descensión

Entre las dos naves menores y en el segundo pilar a los pies de la Catedral, está la Capilla de la Descensión fundada por Enrique II, que es el verdadero origen de la Catedral, pues aquí estuvo el Altar Mayor de la Basílica visigótica, y también, está la venerable tradición del milagro de la bajada de la Santísima Virgen para imponer la casulla al Obispo San Ildefonso.

Catedral de Toledo

Arzobispo de Toledo
 Primado de España


Don Braulio Rodríguez Plaza nació en Aldea del Fresno (Madrid) el 27 de enero de 1944, el séptimo en una familia de nueve hermanos. Desde 1960 estuvo en los Seminarios Menor y Mayor de Madrid, donde realizó estudios humanísticos, filosóficos y teológicos. En 1973 obtuvo la Licenciatura en Teología Bíblica en la Universidad Pontificia de Comillas. Tras dos años de estudio (1979-81) en L'École Biblique de Jerusalén, se diplomó en Sagrada Escritura, y ya en 1990 alcanzó el grado de Doctor en Teología Bíblica por la Facultad de Teología del Norte, con sede en Burgos, con la tesis doctoral «El proceso de Jesús ante el Sanedrín y la catequesis cristiana primitiva». Posee amplios conocimientos en los campos bíblico, litúrgico y de pastoral familiar.